La Playa Papagayo se encuentra dentro del Monumento Natural de Los Ajaches, al sur de Lanzarote. Una cala de gran belleza, con tranquilas aguas turquesas y cristalinas. Esta playa está en el extremo meridional de la isla, con un paisaje de fina arena blanca y bordeada por paredones del cantil. Es ideal para ir con la familia y disfrutar de la tranquilidad que ofrece, ya que está protegida del viento y por lo general tiene aguas tranquilas.
Es una de las favoritas de los turistas, altamente recomendada y está considerada como una de las mejores playas de Lanzarote. Si estás en la arena, podrás ver gente subiendo y bajando constantemente las escaleras que llegan a la cala, o algunas embarcaciones como kayas y barcos pequeños que llegan a la playa desde el agua. Es muy recomendada para hacer snorkel y submarinismo, por su gran fondo marino. No te querrás salir del agua.
A esta caleta se accede por pistas de tierra, lo cual agranda su atractivo exclusivo. Para llegar, fíjate bien en las señales. Hay que pagar unos 3 € por entrar y dejar los vehículos en aparcamientos vigilados junto a las playas.